Yin Yang

Yin Yang

"Dios no te da las personas que quieres, te da las que necesitas. Para ayudarte, para herirte,  para dejarte, para amarte y para convertirte en la persona que debías ser"- frase extraída de Pinterest

Muchas veces se lo pregunté a Dios. En la soledad, con mis rodillas adoloridas sobre el suelo duro, las memorias y pensamientos se deslizan por mi mejilla y el bramido contenido, liberado en una pregunta suave: "¿Por qué Dios?".

¿Por qué la maldad en el mundo? ¿Por qué mentiras? ¿por qué hipócritas? ¿Por qué las heridas? Y si deben existir ¿Por qué las tengo que sentir? ¿Por qué?

Muchos momentos mirando el mundo en negro, como mucho blancos deslumbrantes y nada más.

Ahora bien, cuando enfocas la vista en la nada, no ves el todo que te rodea. Hay blanco y muchos colores más. Rosas, azules, violetas, amarillos, verdes... un caleidoscopio infinito. 

¿Cómo conocer la bondad sin saber qué es la maldad? ¿Sabría acaso que soy fuerte sin haber pasado por retos duros? ¿Podía decir que soy buena persona sin haber conocido a una mala? ¿Es posible decir que algo es mentira sin conocer la verdad? ¿Se puede desear la paz sin estar bajo el yugo de la batalla?

Las sombras existen porque la luz también. Sino, son  tinieblas. La luz existe porque luego hay oscuridad. Si no, te deslumbra. Todo eso negativo es de utilidad, tanto para abrirnos los ojos como para mover nuestros miembros. Cada persona mala, cada desgracia, todo tiene un fin.

Ahora sé lo fuerte, valiente, dulce, etc que soy: porque he estado y conocido el lado opuesto. Y a veces lo encuentro. Pero hay que aprender a manejarlo, a encontrar el balance de uno mismo.

Es odioso, es penoso pero necesario. Pero nada hay que no podamos superar. Si no fuésemos capaces de hacerle frente a eso que nos atormenta, el mundo estaría vestido de negro y no habría batalla alguna.

Yanil Sabrina Feliz Pache