Escrito desde adentro

Un padre de verdad http://regalatuscanciones.com/articulos/oferta-regalo-personalizado-dia-del-padre Hoy es un día especial: celebro, celebramos, el día del padre. Esta fiesta no tiene un himno como lo posee el día de la madre. Desgraciadamente mis letras, aunque apasionadas, son aún muy frágiles como para volverse un himno. Mas ese fuego me mueve hoy a dedicarle algunas letras a ese ser especial por elección. Al igual que con una madre, ser un padre es algo que no se gana con sólo la genética. Pero ser un verdadero padre es algo mucho más complejo: es más bien voluntario. Cuando un hombre descubre que  será papá, tiene (a grosso modo) tres elecciones: convertirse en mago y  desaparecer del mapa, rechazar el cargo pero contribuir económicamente o aceptar de lleno una gran bendición.Algunos, aún aceptando estar allí, no son más que cuerpos presentes; otros, terminan renunciando a medio camino. Pocos padres de verdad hay: esos que nos miman desde que somos un bulto i

El reino de papel http://www.okchicas.com/wp-content/uploads/2015/08/chicas-poco-femeninas-10.jpg Un compañero imprescindible para mis viajes largos es un buen libro: me gusta hacer dos travesías a la vez. Me zambullo en el mundo de la mente del autor y sus personajes; cuando me canso, lo hago en el del paisaje real tras la ventana o el de las personas que comparten ese instante conmigo. En verdad, me gusta leer en casi cualquier momento. Es para mi uno de los pequeños grandes placeres de la vida. La lectura es mi droga: llegué a ser adicta a ella, al punto de ser casi una Quijote sin armadura. Pero tuve que reducir su dosis ante la potente sustancia de la vida. Lo mejor de ella es que puedo combinarlas a ambas.  Uno de esos detalles que lo hace más delicioso para mi, el leer, es el libro físico en sí: el aroma a libro nuevo o viejo, la sensación de la página entre mis dedos, su peso sobre mis piernas y su magia ante mis ojos. A veces me gusta sentarme con un libro e

Días de cine https://www.theodysseyonline.com/interview-drunken-movie-theater-employee-final-chapter No recuerdo exactamente cuál fue la primera película que fui a ver al cine. La primera que me viene a la mente fue la de "Peter Pan: en el regreso al país  de Nunca Jamás". Sólo era una niña, pero disfruté mucho. No puedo asegurar que esa fuese la primera, pero sí que no fue la última. Y cada vez que fui guardó su encanto: el aroma a palomitas con mantequilla, carteles con luces, pósters, el murmullo... En una sala de cine ves a toda clase de personas: desde los súper puntuales (yo incluida) que llegan 20 minutos antes de la hora, solos en la sala, con algo de miedo a que resulte mala, hasta los previsorios que llegan 20 minutos después, evitando así los anuncios de Coca Cola y seguros de vida. Los que no tocan las palomitas hasta que no se apagan las luces y los que ya se las han acabado, los que compran el combo gigante y los que llevan su propio snack bar e

Comedia superheroína G. Jugnot- productor francés En esta vida teñida de gris, la comedia brinda color (aunque sea negra).  No se puede estar en el limbo, eso es cierto. Hay que tocar la pena y la miseria,abrir los ojos y oídos a todos los aspectos asquerosos del ser humano e ignorar el hecho de que para la prensa, nuestro lado bueno no sirva para ganar dinero. Así, recibimos constantemente por todos los medios de comunicación (incluso Facebook se ha vuelto uno) una serie de bombardeos de tragedia que duelen bastante.  No obstante, creo que se me perdona el que no me guste estar embarrada en nuestra putrefacción 24/7. Así que da igual si me juzgan por ver la ruleta y Los Simpson para tratar de endulzarme las comidas y momentos de relax; y no que me duela el cuello mientras repruebo las noticias de "Niño de 10 años que asesina niña" o "Más muertos por atentado terrorista". La comedia nos sirve como medio de desconexión de la amargura "

Aprendiendo a perderse Clarice Lispector- escritora brasileña Soy una pequeña hormiguita marrón en esta enorme ciudad. Miro hacia delante, a las calles, pozos horizontales, repleta de otras hormigas como yo. Cada vez que levanto la cabeza, me sorprendo: ¡Y pensar que estos gigantes de concreto que tratan de cubrir el cielo son producto de manos de carne y hueso! Pero llega un punto en que la obra de arte cobra vida propia. Ahora la ciudad no es objeto sino ente que nos alberga con vida en sus entrañas de acero. Yo, eterna despistada, siento que, más que albergarme, me devora. Así pues, me lavo las manos del destino de mis salidas. Ya no pienso en que haré diligencias ni que saldré a pasear. Sólo pongo mis pies en manos de la aventura. Admito que mi orientación en las tripas de este monstruo hermoso ha mejorado bastante, pero no me fío: me sigo sorprendiendo. Algo es seguro: cuando eres un perdido eterno, tienes que aprender a disfrutarlo. Claro, podría arrojarme

Carta para el Reverendo King Discurso de Martin Luther King Jr en agosto de 1963 Estimado reverendo King.  Hace casi 53 años que su voz se hizo trueno e incendió los corazones de una nación. En vivo y en directo, claro está. Pues en 53 años, sus palabras espectrales siguen siendo igual de maravillosas. Ciertamente logró muchas grandes cosas; numerosas leyes en defensa de las personas de color se deben a aquel maravilloso discurso tras una marcha titánica  hasta el Capitolio de los Estados Unidos. Aquel glorioso agosto quedó marcado en la historia del mundo. Desgraciadamente el virus maligno permaneció con vida en las mentes y corazones de muchos. Sus palabras quedaron plasmadas en las tablillas de la historia, pero no en la forma de actuar de los oyentes y lectores. Henos aquí, medio siglo después. Personas de color que caminan por diversas calles del mundo. Libres, sí. Con derechos e igualdades, sí. Pero más de pantalla que de sustancia, pues ellos, como mucho

Hasta entonces http://prensacristiana.org/wp-content/uploads/2014/06/familia.jpg Nunca supe bien lo que era la nostalgia. Conocía su nombre pero no su rostro. Ahora ella se ha presentado y me acompaña. Su compañía me recuerda que siento, lo cual es bueno, pero igualmente me recuerda la existencia del dolor. Ella me quita el sudor de la frente mientras camino en estas tardes ardientes de verano. Y, mostrándome las gotitas, me recuerda ese calor en mi hogar. Me señala las familias caminar juntas y, sin darme cuenta, me saca una fotografía de los momentos con los míos. Me dice que escuche las frases y anécdotas y que mire los reflejos distorsionados en el espejo del océano. En las noches es cuando más se acerca. Se pega a mi en la cama y me llena los oídos de los "recuerdas cuando...".  Ella hace dulces y divertidos los reproches y motivos de enojo. Memorias que saca de mi cerebro y me las reproduce en película de 5 dimensiones: el olor del café en greca a

Atar el nudo http://www.undetalleazul.com/wp-content/uploads/2013/04/anillo-compromiso.jpg Es difícil hablar del amor cuando no se ha amado. Más que difícil imposible. Todo ser humano ama: se ama a una madre, a un padre, a un hermano, a un amigo... pero no es igual a ese amor apasionado que vuelve nuestra cordura una mera hoja de papel en llamas. Yo he amado. En el pasado, he navegado en ese mundo etéreo; pasado que es pasado y no murió para ser presente. Y, aunque mi único amor en este momento es a Dios y a la vida misma, no sé si haya olvidado completamente la llaga de la flecha extirpada.  Aún así, quiero intentar hablar de ese mundo, por los que aún están allí. No con la ponzoña en los dedos de un espíritu despechado. Más bien con las palabras tiernas y melancólicas de una escritora aficionada. Adentrarme a esa parte desconocida en que la flecha se encarna en los dos amantes y los hace inseparables. La diferencia entre presentarse como novios a esposos es abism

Juguetes espaciales http://www.omicrono.com/wp-content/uploads/2015/02/cara-espacio-2.jpg A veces pienso que alguien nos mira desde arriba. Pero no precisamente extraños hombrecitos verdes con cabezas enormes y ojos completamente negros.  Más bien imagino que somos el juguete especial de una niña que habita en el cosmos ¿Se llamará Tulip? ¿Aliana? ¿Siso? ¿Gala? ¿Cosmos? Se me presenta como una preciosa nenita de piel color azul celeste, contrastante con las paredes negras de su casa. Su pelo casi blanco brilla por el shampoo de estrellas y sus estornudos generan pequeñas galaxias.  Ella sostiene el planeta, su pelota maravillosa. La mira fijamente y disfruta con las pequeñas criaturitas que en ella moran. Somos hormigas de una granja, insectos en sus manos. Y ella, a su forma, nos ama. Muchas veces nos saluda, aguardando con esperanza que alguno de nosotros la miremos. Para ella somos los bichos raros y bonitos de sus ojos. El tiempo para ella va tan lento que aú

Basta ya Coco Chanel- diseñadora francesa Querida "amiga": basta ya.  Basta ya de tus mentiras sin control. Te conocí y me agradaste. Me conociste ¿Te agradé? Ese día pensé que sí, ahora no lo sé. Yo, con lentitud y dificultad, iba despojando mis capas y te mostraba mi realidad, mi ser. Mientras ¿Qué hacías tú? Me pintabas una tú de colores brillantes con matices de gris: un pasado sombrío opacado por un presente radiante. Yo sonreía de alegría e inspiración ¿De qué lo hacías tú? ¿De qué lo haces? ¿Intentas sostener tu imagen?¿Te burlas de mi? Poco a poco miraba tus capas en el suelo, pero las piezas no encajaban. El mundo las iluminaba, me iluminó. No eran tuyas, nunca lo fueron. Aún no lo son. Les daban y dan patadas: entonces se ven los gusanos. Me dio tristeza ver eso. Mas yo seguí creyendo. Y lo sigo haciendo ¿Eres malvada y yo idiota? ¿O estás perdida y yo soy ilusa?  Ya no sé qué hacer. Te veo y olvido todo. Te vas y me lo recuerdan. 

Trabajo constante "Mi misión- estar tan ocupado amando mi vida que no tenga tiempo para el odio, arrepentimiento, preocupación o miedo"- frase extraída de Pinterest Miro todos los días tráfico: sea de vehículos o de personas. Transportistas, camareras, empresarios y conserjes. Cada uno recibe los agobiantes rayos de sol y oleadas de calor con más esperanza que fastidio. "¿Por qué esperanza?" me dirán algunos con extrañeza, ante la imagen mental de un traje de seda azul o un uniforme azul marino con profusas manchas de sudor. Pues porque es un grito mojado de la llegada del señor verano. Lo que, en estos lares, es sinónimo claro de vacaciones.  Vacaciones equivale (para la mayoría) en arrojar uniforme y zapatos al fondo del armario y salir volando a playas, excursiones o simplemente a una cita con "Netflix and chill".  Sí, todos aman las vacaciones de las responsabilidades laborales y las tensiones de fechas de entregas o jefes poco compr

Historias en la piel Goethe- poeta alemán Me miro en el espejo antes de salir. Lo hago yo y lo hacemos todos. Algunos, una milésima de segundo para asegurarse de ser la misma persona y no un insecto monstruoso. Unos un instante para asegurarse de que todo está en orden, que se ven "decentes". Otros, varios muchos minutos de contemplación y alabanza (o críticas). Pero, dado que aún tengo tiempo, me apetece leer mi reflejo. Miro mi piel morena, mis cabellos negros y mis ojos profundos. Pero no me veo sólo a mi.  Veo en mi imaginación la mezcla cultural. No a mis padres. No mis parientes. Sino a los ancestros que no conocí. A mi mente se presentan las espaldas sudadas de negros africanos, las lágrimas los de aborígenes y los rostros pétreos de los hijos fugitivos del león de Castilla (y otras comarcas).   Cada rostro se dibuja de forma imaginaria, cambiando de peinado, de ropa, a paso cíclico como lo hizo el tiempo.  Luego salgo. Y ya habiéndome aficiona