Manipuladores

Manipuladores

Somos criaturas manipuladoras. 

Si alguien nos llama "manipulador", nos sentimos ofendidos. Pero, pensándolo bien, es una conducta común.

Somos maestros desde el inconsciente. Hablamos y actuamos buscando una reacción. Y, muchas veces, tratando moldearla y disminuir (incluso anular) la capacidad reflexiva de la otra persona.

¿No es una especie de manipulación lo que hacen los bebés? Lloran cuando se alejan sus padres pues ven que, con esto, los atraen. Muchas veces se dicen cumplidos o hacen regalos para crear un compromiso: que nos digan también lo bellos o listos que somos, que nos den un regalo (aunque nos educan para que no sea así) o sencillamente resaltar nuestra presencia.

Estos son tecnicismos. Nada que ver con la manipulación malvada: esa que se hace tras presiones físicas, el miedo, la vergüenza, chantajes, sobornos, dominación, victimismo, etc. Hacerse pequeños o grandes a voluntad con la búsqueda de un beneficio, aunque ello implique el sufrimiento de otra persona. Eso cae en abuso psicológico. No obstante, la línea se puede hacer delgada muy fácilmente.

Aunque algunos saben esquivarlos, todos somos vulnerables. Y ni hablar de los deprimidos, los niños, jóvenes, los traumatizados, los seguidores...

Todos somos diariamente manipulados de alguna forma. La publicidad que nos introduce "necesidades" nuevas todos los días. Gasta, come, viaja, juega, ven... Un constante brainwash propio del capitalismo y consumismo, del deseo de ser un miembro más de la masa. La manipulación funcionando a tope.

Ojo con todo esto. Si promulgamos la manipulación y le damos rienda suelta, tendremos un montón de cuerpos en stand-by. Y sólo Dios sabrá cuándo saldrán los cerebros de la lavadora.

Yanil Sabrina Feliz Pache