El auténtico perdedor

El verdadero perdedor

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Muchas caídas y raspones; fracasos y desazones. Demasiados momentos amargos. Todo antes de que me diese cuenta...

...De que no soy una perdedora. 

Porque perdedor no es el que falla, ni el que mete la pata (como si fuese un animal) hasta lo más profundo del fango.

Perdedor es el que da la batalla por vencida sin siquiera haber sacado armas o argumentos. Perdedor es el que hace trampas para poner el destino de su lado: así gana la batalla recreada en su utopía, mientras que en la realidad merece el castigo. Es el que se vuelve un esclavo... ¡Sin un amo de por medio! Se hace siervo de sus propios pensamientos que lo paralizan.

Esa frase de que "todos somos ganadores", puede ser cierta. Todo error es una fuente de aprendizaje, de conocimiento y/o de crecimiento. Aún en esas competencias organizadas donde uno se lleva el trofeo y el otro, los consuelos. Si el "perdedor" no se ofusca, puede ganar energías y motivaciones, tácticas y consejos...

Imagina que eres un trozo enorme de mármol. Tus éxitos son lijaduras que moldean la piedra. Tus fracasos, las embestidas que sacan esquirlas y dan forma. Ambas cosas construyen obras de arte que residen bajo lo que parece simple e inerte.

Antes de tirar la toalla ¿No sería interesante tomarla?

Yanil Sabrina Feliz Pache

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