La tercera ley

La tercera ley

"Actioni contrariam semper & æqualem esse reactionem: sive corporum duorum actiones in se mutuo semper esse æquales & in partes contrarias dirigi"

Es el enunciado de la tercera ley de Newton. Traducido sería: "Con toda acción ocurre siempre una reacción igual y contraria: quiere decir que las acciones mutuas de dos cuerpos siempre son iguales y dirigidas en sentido opuesto".

Las leyes de la física son "inamovibles"; axiomas que rigen el funcionamiento del universo racional. Pero el cosmos del ser humano, los misterios que alberga en su interior, todo lo que rebasa las barreras de las sinapsis neuronales y pasa a planos más intrigantes, no podemos englobarlo del todo en ello.

Y digo no del todo porque en parte se podría decir que lo hace. Toda acción que ejecutamos, decisiones tomadas, etc. tienen una reacción. Claro está que no siempre se recibirá la misma ni en la misma intensidad. Pero lo que siempre existirá es una respuesta. Aunque no siempre lo parezca.

Si das un puñetazo, es posible que no te lo devuelvan con la mano. Pero ¿Y el impacto de una lágrima, el desprecio del herido o su posible ruina? Cuando das una caricia, puede que no sientas la tibieza de la otra mano sobre tu piel. Pero puede ser más intenso el calor desprendido de la gratitud o la pasión generada por tu gesto.

Son pequeñas grandes cosas que sin darte cuenta ocurren. Cuando actuamos y nos cerramos una vez acabado todo, nos hacemos inmunes a las recompensas o castigos implícitos. Cierto es también que muchas personas no reciben su merecido inmediatamente; otras se niegan a aceptarlo. Pero, por ello, no es 100% infalible. 

Cuidado con lo que decimos y hacemos. Porque la respuesta será inesperada, pero igualmente venidera. Pero tampoco te reprimas: el éxito es reacción de la acción, no del miedo.

Yanil Sabrina Feliz Pache