El valor de los valores
El valor de los valores
Desde que somos pequeños se nos inculca una escala de valores: cualidades que funcionan como un esqueleto, sostén de la dignidad y parte de la personalidad. También son como una brújula integrada que sirve de guía a nuestro comportamiento.
Deberían ser incorruptibles ¿No? Pues no siempre es así.
¿Cuánto cuestan los valores? En teoría no tienen precio. En la práctica...
Para algunas personas, la fama, la fortuna, la belleza, el rencor, el odio, la rabia, el "amor" (yo lo llamaría dependencia o manipulación), normas tan vacíos y falsos como sus escribanos (no siempre es el caso; si no, es la desobediencia de las verdaderas)... muchas personas creen que esa moneda pesa más ¿En serio? ¿Lo vale?
Todo eso podría ser visto como un martillo que quiebra esos huesos. Si vendemos nuestros valores, rompemos con parte de nuestra identidad. Y se crea una amenaza a la integridad, tanto la propia como de quienes nos rodean.
Claro está, los valores son una elección vital. Son inculcados, no impuestos tiránicamente. Se nos dan porque son benéficos para nosotros. Aunque nos amen con locura, nuestros padres y/o mentores respetan la libertad con que nacemos. Si, desde un inicio, rechazas el salvavidas, pues es tu elección navegar en el océano sin auxilio. Pero, si los abandonas en medio del camino, luego de haberte adaptado a su auxilio, corres más riesgo de ahogarte en la penuria.
Dime entonces ¿los vendes al mejor postor?
Yanil Sabrina Feliz Pache
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